Otra Semana Santa repartiendo sones!

Tras la primera actuación de la cuaresma acompañando a nuestra titular. Nos pusimos manos a la obra para incrementar el repertorio de paso lento, el nivel de la banda se notaba que había subido tras el año pasado y para aprovecharlo se amplió el repertorio. Se trabajó durante dos semanas enteras y el trabajo dió su fruto por fín se saco la marcha "Soleá" de Alberto Escamez y la famosa marcha "La Saeta" de Joan Manuel Serrat.

JUEVES SANTO

Después de una gran misa, en medio de la plaza mayor con los pasos fuera y la interpretación de la ultima cena por parte de lo vecinos del pueblo y el padre Bala, comenzó la estación de penitencia con María Magdalena, Jesús Nazareno y Virgen Dolorosa. Los nervios estaban a flor de piel y la banda comenzó la procesión enlazando la Marcha Real y La saeta tras ello seguimos dicha procesión por las calles del pueblo.

VIERNES SANTO

Tras la celebración de la Santa Misa, comenzamos la procesión interpretando el Toque de Silencio al Santo Sepulcro, por parte de dos de nuestros componentes Juanma y Cristina. Seguimos la procesión hasta la ermita del Santísimo Cristo del Humilladero donde se llevo a cabo un acto con las imágenes.

SÁBADO SANTO

Gran noticia la que recibimos el día de la bajada de la patrona por parte de la Cofradía Sacramental de la Sagrada Cena, nos comentaron que querían que nuestra banda los acompañaran en el traslado hacia Cánovas para realizar la Procesión Magna por la tarde. La banda no lo dudo un segundo en aceptar la proposición por el gran cariño que le tenemos a esta cofradía que tanto y tanto a confiado en nuestra formación.

A las 11 de la mañana comenzó nuestro pasacalles hacia la iglesia de Santiago, a las 11:30 salió el misterio de la Sagrada Cena a los sones de la Marcha Real enlazada con La Saeta y pusimos camino hacia Cánovas interpretandole todo nuestro repertorio a tan ilustre paso de la Semana Santa Cacereña una vez acabado el traslado nos despedimos de nuevo con la Marcha Real y pusimos de nuevo nuestros sones al publico cacereño despidiendonos con ordinario.